Un dramático hecho ocurrido en Pocito tuvo un final feliz gracias a la rápida intervención de una suboficial de la Policía Comunal, quien logró salvar la vida de un bebé de dos años que se estaba asfixiando.
El episodio se desencadenó en la tarde del martes, cuando Rocío Quiroga, madre del menor, llamó desesperada al 911 desde el barrio Las Pampas alertando sobre la crítica situación de su hijo, que presentaba dificultades respiratorias y convulsiones.
De inmediato, un móvil policial llegó al domicilio y, ante la gravedad del cuadro, los efectivos decidieron trasladar de urgencia al niño al Hospital Federico Cantoni. Durante el trayecto, la cabo Daniela Verón le practicó maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP), logrando estabilizarlo parcialmente y permitiendo que llegara con signos vitales.
En el hospital confirmaron que el pequeño sufría convulsiones y dispusieron su derivación al Hospital Dr. Guillermo Rawson, donde finalmente fue estabilizado y se encuentra fuera de peligro.
Desde la Policía destacaron la labor de la cabo Verón y de los efectivos intervinientes, resaltando que la decisión rápida y el profesionalismo marcaron la diferencia para evitar una tragedia.
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