La provincia de San Juan vuelve a ser escenario de una crueldad extrema hacia los animales. Esta vez, en un camino del departamento 9 de Julio, fue encontrado un perro con signos de haber sido brutalmente torturado: estaba ahorcado, le habían arrancado ambos ojos y presentaba una herida profunda en la zona abdominal, compatible con un ataque con arma blanca. Además, tenía un alambre atado fuertemente al cuello.
El hallazgo fue difundido por proteccionistas que no dudaron en expresar su indignación ante un nuevo hecho que se suma a una larga lista de casos de maltrato animal que vienen ocurriendo en lo que va del año. San Juan se posiciona como una de las provincias con mayor cantidad de crímenes contra animales en 2025, y la comunidad que lucha por sus derechos asegura estar agotada.
“¿Quién controla estas situaciones? ¿Dónde está la justicia? Si los responsables pagan multas mínimas en cuotas eternas y con miles de protocolos judiciales, jamás habrá un cambio real”, expresaron desde el entorno proteccionista.
El pedido es claro y urgente: penas más duras, cárcel efectiva y un compromiso real de las autoridades. “Queremos que se sienta el peso de la ley si tocan un animal. Basta de tantas torturas. No son cosas, son vidas”, concluyeron.
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