Una operación militar de gran escala atribuida a Israel sacudió esta noche a Teherán, capital de Irán, con ataques precisos que habrían causado la muerte de tres figuras clave del aparato militar y científico del régimen iraní.
Según información oficial difundida por medios iraníes, los blancos del operativo fueron seleccionados entre los más influyentes del círculo de seguridad y desarrollo nuclear del país.
Líderes eliminados en el ataque
• Mayor General Gholam Ali Rashid: comandante del Cuartel General Central Khatam-al Anbiya del Estado Mayor General iraní, una figura de alto rango en la planificación militar estratégica del país.
• Fereydoon Abbasi-Davani: exjefe de la Organización de Energía Atómica de Irán, clave en el desarrollo del programa nuclear iraní y exdiputado del parlamento islámico.
• Dr. Mohammad Mehdi Tehranchi: físico nuclear, rector de la Universidad Islámica Azad, y uno de los principales promotores académicos del programa científico-nuclear de la República Islámica.
Objetivo estratégico y consecuencias
La operación, presuntamente ejecutada por el Mossad y la fuerza aérea israelí, apunta a debilitar las capacidades militares y nucleares de Irán en un contexto de máxima tensión en la región. A su vez, coincide con intentos diplomáticos por reabrir canales de diálogo nuclear entre Irán y potencias occidentales.
Fuentes cercanas a organismos internacionales afirman que se ha detectado actividad inusual en instalaciones nucleares como Natanz, lo que alimenta la preocupación por posibles fugas o intentos de represalia inmediata.
Reacción iraní
El gobierno iraní calificó el ataque como un “acto de guerra” y aseguró que habrá una respuesta rápida y contundente. Las fuerzas armadas se encuentran en alerta máxima, mientras se reportan cortes de energía, vuelos suspendidos y presencia militar en distintos puntos de Teherán.
Preocupación internacional
Estados Unidos negó participación en el operativo, aunque confirmó estar monitoreando la situación de cerca. Por su parte, el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) se declaró en estado de emergencia ante el riesgo de afectación a instalaciones sensibles.
Comentarios