Una mujer sufrió una descompensación cardíaca este lunes por la mañana en las inmediaciones del Sindicato Empleados de Comercio, en pleno centro de San Juan, y fue salvada gracias a la intervención inmediata y coordinada de tres agentes del Estacionamiento Controlado (ECO).
Natalia Rodríguez, monitora urbana, fue la primera en detectar que algo andaba mal y dio aviso. En minutos, su compañero Alexis Vaca llegó al lugar en monopatín, portando una mochila equipada con un desfibrilador externo automático (DEA). Junto a Maximiliano Chifel, comenzaron con maniobras de RCP y utilizaron el DEA para estabilizar a la víctima, quien se encontraba inconsciente.
La rápida y efectiva reacción del equipo fue clave para mantenerla con vida hasta que llegó la ambulancia, que completó la asistencia médica. El director del área, Martín Sassul, destacó la preparación técnica y emocional de los agentes, y señaló la importancia de ampliar este tipo de cobertura a zonas de alta circulación como el Parque de Mayo o el Centro Cívico.
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