En un episodio que puso en evidencia la necesidad de diálogo entre vecinos, Augusto Roberto Quiroga fue condenado a 1 año de prisión de ejecución condicional luego de amenazar con una escopeta a dos albañiles que trabajaban en una obra en construcción.
El hecho ocurrió el pasado 24 de julio en la calle Garbini, Capital, donde los trabajadores Mauricio y Leonardo Morales cumplían tareas de albañilería. Tras un acuerdo previo para finalizar la jornada a las 15, se produjo un altercado cuando Quiroga salió de su vivienda y, tras discutir, regresó armado mientras gritaba: “¡Dejen de hacer ruido!”.
Los hermanos Morales se refugiaron en la obra y llamaron al 911. La Fiscalía, representada por Daniela Pringles y Rodrigo Herrera, calificó la conducta como “amenazas agravadas por el uso de arma de fuego”.
En la audiencia de control de detención se alcanzó un acuerdo de juicio abreviado que culminó con la condena. Además, el acusado deberá cumplir reglas de conducta durante dos años y se ordenó el decomiso de la escopeta utilizada en el hecho.
Este caso resalta la importancia de resolver los conflictos de forma pacífica y el compromiso de la justicia en la protección de la comunidad.
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