La Municipalidad de Caucete acumula una deuda escandalosa con DECSA que, según el Ente Provincial Regulador de la Electricidad (EPRE), asciende a $550 millones. Esta suma corresponde a servicios de alumbrado público consumidos hasta enero de 2025 y, pese a los acuerdos firmados, la intendenta Romina Rosas, ahora también candidata a diputada nacional por Fuerza San Juan, no pagó un peso.
El EPRE aclaró que la deuda fue determinada tras una auditoría exhaustiva solicitada por el propio municipio en 2024, y que incluso aplicaron el principio “in dubio pro usuario”, favoreciendo a la Municipalidad ante inconsistencias detectadas en los informes. Aún así, la administración local incumplió el acta acuerdo de julio de 2025 y, lejos de saldar el monto, la intendenta recurrió a la Justicia para anular la resolución.
Desde el organismo provincial advierten que la prolongación de esta deuda pone en riesgo la previsibilidad del Sistema Eléctrico Provincial y compromete la sostenibilidad económica del servicio para todos los usuarios.
Mientras tanto, los cauceteros se preguntan: ¿una intendenta que evade compromisos millonarios con el servicio eléctrico puede garantizar gestión responsable en otras áreas y, encima, aspirar a un cargo nacional?
Comentarios