Un grupo de padres y madres del Colegio Secundario María Auxiliadora manifestó su preocupación tras conocerse que un alumno ingresó al establecimiento portando un arma de aire comprimido.
En una carta dirigida a la dirección del colegio, los tutores advirtieron que el episodio representa “un riesgo real para la seguridad de estudiantes, docentes y personal”. En el documento, remarcaron que “un arma, aunque sea de aire comprimido, puede causar lesiones graves o incluso irreparables”.
Si bien las autoridades educativas actuaron conforme a los protocolos establecidos por el Ministerio de Educación, las familias consideran que las medidas adoptadas no alcanzan frente a la gravedad del hecho ni frente a las secuelas emocionales que provocó entre los alumnos.
Los padres también manifestaron que no recibieron garantías claras de que este tipo de situaciones no volverán a repetirse, ni información concreta sobre las acciones preventivas que se implementarán para garantizar un entorno escolar seguro.
“La preocupación es aún mayor porque los estudiantes sienten temor ante la posible reincorporación del alumno implicado, lo que afecta su bienestar emocional y su derecho a aprender en un entorno libre de amenazas”, señala el texto.
Finalmente, solicitaron que se revisen y refuercen los protocolos de seguridad y que se evalúe con seriedad la reincorporación del estudiante involucrado. “Confiamos en que las autoridades del colegio y del Ministerio de Educación actuarán con la responsabilidad que la situación requiere, priorizando el derecho de los niños y niñas a un entorno escolar seguro”, concluye la carta.
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