La Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) encendió una señal de alarma ante el incremento de casos de muerte súbita en bebés menores de un año y advirtió que compartir la cama con los adultos —una práctica conocida como colecho— multiplica el riesgo.
Según datos oficiales, en el país se registra una muerte súbita por semana en lactantes. El informe difundido por la SAP indica que el 69,2% de las muertes infantiles domiciliarias están relacionadas con el colecho. De los 149 fallecimientos anuales en menores de un año registrados en los hogares, 73 corresponden a este tipo de casos.
Las causas más frecuentes son el aplastamiento accidental, el sobrecalentamiento y la obstrucción de las vías respiratorias. Los especialistas advierten que la probabilidad de muerte súbita es ocho veces mayor cuando el bebé duerme en la cama de los padres y hasta 17 veces mayor si lo hace sobre un sofá.
Otros factores de riesgo incluyen el hacinamiento, el tabaquismo en el hogar, los nacimientos prematuros y el bajo peso al nacer.
En el marco de la Campaña de Sueño Seguro, que se desarrollará del 13 al 18 de octubre, la SAP promueve pautas para prevenir tragedias. “El lugar más seguro donde puede dormir un bebé es en su cuna, al lado de la cama de los padres”, subraya el documento oficial.
Entre las recomendaciones destacan: acostar al bebé boca arriba, evitar almohadas y juguetes en la cuna, usar colchones firmes, no abrigar en exceso y ofrecer el chupete para dormir. Además, se insiste en mantener los controles médicos y cumplir con el calendario de vacunación, incluyendo la inmunización contra el virus sincicial respiratorio durante el embarazo.
La SAP resalta la importancia de consultar con el pediatra para orientar a las familias que optan por el colecho, con el objetivo de reducir riesgos y garantizar un descanso seguro para el bebé y sus padres.
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