La intendenta de Caucete, Romina Rosas, encendió las alarmas y advirtió que el municipio podría llevar a la Justicia el conflicto que mantiene con la empresa distribuidora de energía Decsa, por una abultada deuda que la firma reclama. Desde la comuna aseguran que la empresa cometió “errores enormes” en la facturación y cobró de más sin la autorización del Ente Provincial Regulador de la Electricidad (EPRE), lo que habría generado un desfasaje económico millonario que, según afirman, ya fue absorbido por los vecinos cauceteros a través de sus boletas.
“Desde la comuna le estamos diciendo a Decsa: devuélvanos lo que nos cobraron de más sin tener el aval del EPRE”, sostuvo Rosas en declaraciones radiales. La intendenta explicó que el problema se centra en el período comprendido entre diciembre de 2022 y enero de 2025, durante el cual no se habrían valorado ni contabilizado correctamente los aportes de los usuarios en sus facturas.
Según los cálculos del municipio, el error de Decsa rondaría los $500 millones. “Dicen que al municipio le queda esto por pagar, pero también solicitamos que se revisen los errores de medición y cálculo del gasto”, indicó Rosas. A raíz de esta situación, el municipio adoptó una doble estrategia: si bien está dispuesto a negociar un plan de pago, también recurrirá a la Justicia para que se determine la legalidad de los cobros.
Ese eventual plan de pago, subrayó la jefa comunal, debería contemplar los montos que Decsa habría cobrado indebidamente por alumbrado público. Actualmente, el municipio y la empresa transitan una etapa de revisión de un mes, durante la cual se están analizando los gastos reales en alumbrado para proyectar hacia adelante.
“No vamos a renunciar a la vía judicial. Esto no impide que vayamos a la justicia en torno a la resolución que hemos generado”, concluyó Rosas, anticipando que el conflicto podría terminar en los tribunales si no se alcanza un acuerdo justo.
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